Centro de mesa ¿yo?

Lo cierto es que, como muestra la evidencia, Margarita es, a partir de ahora, auténticamente centro de mesa. Desde el lunes, se integra con más facilidad a la vida familiar...

El detalle de la sillita es que le hace ver sus rollos de manera esplendorosa. Y ella, que de delgadez no sufre, se ve aun más "Pequeño Buda". Para hacerle justicia, la sillita es como la TV: "hace ver mas gorda..."

1 Comments:
¡Pero que maravilla esa sillita! Gran cambio en la vida de Margarita que ahora ve el mundo desde otro ángulo en su trono moderno.
Está precioso el blog, que estético! como sus autores nomás. Que rico que la niña flor conoció la nieve tan bien acompañada.
Un abrazo de esta fiel seguidora.
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